Algunas películas nos dieron grandes romances en verano. De hecho, existe el mito de que un «amor de verano» es uno de los que deja una gran marca en la persona. La psicóloga de la USACH y experta en relaciones afectivas y sexualidad, Catherine Escobar, comentó a The Clinic que, si bien los mitos son solo eso, sí hay una importancia que recae en esta estación. Además, también juegan un rol vital el estado anímico de los ciudadanos (sin entrés) y algo tan simple como la luz solar.
“Mi loco amor del verano sigue aquí”, dice una de las canciones más conocidas de Andrés de León. De hecho, existe el mito de que esta estación del año es la mejor para encontrar a la pareja ideal. Pero también hay otro: los amores de verano son difíciles de olvidar y nos dejan una gran marca.
Si bien se tratan de “mitos”, lo cierto es que el cine también ha jugado un papel importante en “idealizar” aquel sentimiento en esta época. Cintas como “Diario de una pasión” (2004) y “Dirty Dancing” (1987) cuentan cómo sus protagonistas viven romances de forma intensa. Además, son historias que muchos adultos recuerdan hasta el día de hoy.
Para saber más de la concepción del “amor de verano”, la psicóloga de la Universidad de Santiago (USACH) y experta en relaciones afectivas y sexualidad, Catherine Escobar, comentó a The Clinic que, si bien los mitos son solo eso, sí hay una importancia que recae en esta estación, ya que “ese tipo de encuentro o relación es generalmente en un periodo estival, en un periodo de vacaciones, donde las personas no están sujetas a su rutina diaria”.
Sobre cómo es vivir un romance para nuestra mente en esta época, la profesional señaló que “hay un contexto que favorece que lo que tú estás haciendo lo percibas de forma diferente, ya sea tanto por el ambiente de vacaciones o que tú estás como desconectado. Entonces, te permites hacer otras otras. Cuando conoces a alguien o tienes una cita, lo ves también como que es especial, porque estás con toda la predisposición a atender los estímulos que están alrededor, con menos estrés. Además, tienes la posibilidad de disfrutar otros escenarios, paisajes y todo eso hace que esta relación de verano se tienda a idealizar”.
Si bien la estación del año es clave, también el denominado “primer tiempo de una relación” es otro factor. “En la parte inicial de una relación, lo que llamamos enamoramiento, estás bajo la influencia hormonal de no estrés y también de mayor endorfina en tu cuerpo. Entonces, todo lo vas a percibir de una manera muy distinto a lo habitual, eso hace que quede registrado como una experiencia favorable“, dijo Catherine Escobar.
“También está el gran beneficio que haya más luz de día. Eso está demostrado de que impacta positivamente en los estados anímicos”, agregó la experta.
Sin embargo, después del “enamoramiento” y concluido el verano, la persona debe volver a su rutina. “Se puede decir que (un amor de verano) no se olvida. Pero cuando pasas la parte inicial, de semanas o dos meses, después viene el choque con la realidad. Tienes que reintegrarte a tus labores habituales y también ahí ves si este enamoramiento se sostendrá en el tiempo”.
La idealización del “amor de verano” que ofrecen las películas
Si bien los filmes pueden ayudar a construir un estereotipo o idealizar algo, lo cierto es que muchas veces se ha escuchado la frase: “quiero tener un amor como el de…..”.
Según la experta, aquello es solo una concepción “idealizada” que nosotros mismos hacemos del sentimiento del amor. “El cine invita a eso. No por ser una película de Hollywood significa que es una copia de lo que sucede en la realidad. Eso también está muy maqueteado”, afirmó la profesional
“Las películas aportan al imaginario, al creer que así va a ser perfecta la fantasía de un sueño“, concluyó la experta.
Fuente: The Clinic