Reconocer el dolor en los gatos puede ser difícil, ya que son expertos en ocultarlo. Sin embargo, es muy importante estar atento a posibles señales para saber cuándo actuar y buscar ayuda profesional. En ese sentido, la Escala de Muecas Felinas (FGS, por sus siglas en inglés Feline Grimace Scale ©) puede resultar útil para identificar el dolor basado en las expresiones faciales de los felinos.
Esta escala, desarrollada por investigadores de la Universidad de Montreal, se centra en cinco características faciales: posición de las orejas, apertura de los ojos, tensión en el hocico, posición de los bigotes y posición de la cabeza.
La Feline Grimace Scale se utiliza observando y puntuando estas cinco características faciales. Cada una se evalúa con una puntuación de 0 (sin dolor) a 2 (dolor moderado a severo). La suma de estas puntuaciones indica el nivel de dolor que el gato puede estar experimentando, siendo recomendable poner atención si el puntaje total es superior a 4.
Puntos clave de la Escala de Muecas Felinas para identificar si un gato tiene dolor
Posición de las orejas: Las orejas de un gato con dolor suelen estar aplanadas y giradas hacia los lados o hacia atrás, mientras que la de un gato sin dolor tienden a estar más derechas y hacia adelante.
Apertura de los ojos: Los ojos de los gatos con dolor tienden a estar entrecerrados o parcialmente cerrados. Cuando un gato se siente bien, sus ojos tenderán a estar abiertos y redondos (más allá de cualquier gesto puntual que puedan hacer).
Tensión en el hocico: Cuando hay dolor, la zona del hocico puede mostrar tensión, con las vibrisas (bigotes) más pegadas a la cara, y los labios superiores tendrán forma elíptica. Por el contrario, lo ideal es que estos tengan una forma redonda.
Posición del bigote: Los bigotes son un indicador importante del dolor en los gatos. Cuando se sienten mal, estos tenderán a estar rectos o incluso encorvados hacia arriba. En un gato sin dolor, estos deberán tener una forma curva y redondeada hacia abajo.
Posición de la cabeza: La cabeza de un gato con dolor puede estar inclinada hacia abajo o contra el suelo, en lugar de derecha y por sobre la altura de los hombros.
La FGS es fácil de usar y puede ser aprendida por cualquier dueño de gato en poco tiempo. Esto es particularmente útil en situaciones de emergencia, como después de una cirugía o en caso de una lesión. Aprender a interpretar estas señales puede marcar una gran diferencia en la vida de un gato, permitiendo intervenciones tempranas y efectivas.
Puedes descargar el manual para identificar el dolor en gatos de la FGS haciendo clic aquí.
También puedes descargar la aplicación gratuita «Feline Grimace Scale” en Google Play o en la App Store, donde podrás revisar cada vez que lo necesites los indicadores de dolor en tu felino.
Fuente: BioBioChile