Para muchas personas, la parte más difícil de una separación es la conversación inicial. Para otros, sobreponerse a la tristeza de terminar un vínculo. Una situación compleja que puede volverse mucho peor, cuando uno de los involucrados no respeta los límites de la distancia.
Ya sean indirectas en redes sociales, mensajes en la madrugada o rumores compartidos a amigos mutuos, sobrevivir a una expareja que no quiere desaparecer de tu vida puede ser muy complejo, sobre todo para cerrar dicha etapa.
Para Marisol Sagredo, psicóloga y escritora, es normal que un duelo despierte diferentes emociones como negación, rabia o tristeza. Pero, «insistir en mantener contacto contra la voluntad del otro no es una muestra de amor, sino una forma de violencia emocional».
Es fundamental que si sientes que una ex pareja no logra asumir el quiebre, y te comienza a acosar, perseguir o invadir tus espacios, deba existir una intervención directa.
Según la experta, Marisol Sagredo, hay acciones concretas que puedes seguir para recuperar tu paz mental.
Comunicación clara y directa: No dejar espacio para las ambigüedades. Tener una conversación firme y sin esperanzas implícitas, ayuda a cerrar la puerta emocional y evita prolongar las explicaciones innecesarias.
Bloquear canales de contacto: Si la insistencia continúa, ya sea por redes sociales, mensajes o llamadas, lo mejor es bloquear por nuestro autocuidado.
Restringir la exposición digital: Siempre es bueno cambiar las claves de acceso a tus redes, como también revisar la privacidad para saber quién tiene acceso a tu contenido. Si es necesario, limita tus publicaciones.
Informar al círculo cercano: Habla con tus personas de confianza para que sepan lo que está ocurriendo y estén alertas. Es importante que nadie entregue información por error.
Registrar los episodios: Si el comportamiento de la expareja persiste, es necesario llevar un registro de fechas, mensajes o capturas de pantalla. Esta información servirá en caso de que necesites ayuda legal o profesional.
Buscar apoyo psicológico: La ruptura es un duelo, pero si se transforma en una persecución, ambas personas necesitan orientación profesional.
No caer en el juego de responder por compasión o culpa: A veces el miedo al “¿y si le pasa algo?” nos hace retroceder. Pero la presencia en la vida del otro no puede ser un calmante a costa del propio bienestar.
Tal como explica Marisol Sagredo, psicóloga y escritora, cuando vemos que una ex pareja comienza a hablar mal con otras personas y realiza publicaciones con el fin de dañar a la otra persona, estamos frente a una violencia psicológica y social que se conoce como «violencia simbólica o reputacional».
Si bien puede existir el dolor ante un término, realizar «desahogos por despecho» es una estrategia para manipular la imagen del otro. » Este tipo de conductas suelen aparecer en personas que no toleran la pérdida de poder sobre el otro, y que buscan “castigar” el abandono a través del desprestigio. Es una forma indirecta de seguir en la relación, incluso cuando esta ya se terminó», nos explica la experta.
En caso de que estés expuesta a una situación así, la profesional recomienda:
«El cierre de una relación debería ser un acto de cuidado mutuo. Pero si la otra persona elige atacar en vez de sanar, entonces la prioridad debe ser la propia seguridad», concluye Marisol.
¿Cómo establecer límites con una pareja que no asume el quiebre?
¿Qué hacer si una ex pareja habla mal de mí?
Fuente: FMDOS