“Haz tus propios jugos détox en casa”, “recetas fáciles de jugos que desintoxican tu cuerpo” y “miren, seguí la dieta de jugos détox y estos son los resultados”. Son solo algunos de los anunciados que se pueden encontrar en redes sociales. Allí se recomienda la incorporación de estos jugos, pero ¿realmente cumplen el propósito que prometen?
Los jugos, que se pueden encontrar en su versión desintoxicante verde, naranjo y batidos rojos, son mezclas de frutas y verduras. Prometen un gran aporte de Vitamina C además de ser desinflamatorios y hechos para “eliminar las toxinas del cuerpo para mejorar la salud”.
Al respecto, la nutricionista y académica de la Universidad Central, Carla Reyes, recalcó a The Clinic que “el cuerpo tiene órganos que son los responsables de la desintoxicación propiamente tal. O más bien dicho, de poder metabolizar ciertos nutrientes y no nutrientes. Ahora bien. Una persona sana, que no tiene ninguna patología crónica y que tiene sus órganos funcionantes, no debería realizar ningún tipo de desintoxicación porque tenemos los órganos que lo realizan. Principalmente, el hígado por un lado y por otro lado también se hace responsable de cierta desintoxicación, porque en realidad no es que estemos intoxicados, sino que es parte del metabolismo, están los riñones y por supuesto los intestinos a través de las deposiciones”.
“Al dar estos denominados jugos détox, lo que tú estás haciendo es mezclando frutas y verduras y quizás algún otro condimento, como la cúrcuma. Le estamos dando a nuestro organismo una mayor cantidad de estos antioxidantes, pero en forma concentrada. En estricto rigor, no es que sean détox, no es que esté desintoxicándome el organismo. Sino que estoy aportando antioxidantes, vitaminas, minerales, que son beneficiosos para la salud”, recalca.
¿Son necesarios los jugos détox?
Reyes afirma que “si tengo una alimentación saludable, si incorporo en forma diaria frutas, verduras y ciertos condimentos, bajo el consumo de aquellas grasas saturadas, alimentos ultra procesados y disminuyo el consumo de alcohol, entre otras cosas, no se debería requería requerir ningún tipo extra de apoyo. Ni los jugos détox, ni tampoco suplementos. Pero si es que no lo estoy consumiendo en forma regular o tengo una alimentación inadecuada, estoy pasando por un proceso de alguna patología. Sí puede ser un apoyo, pero siempre con la indicación de un profesional de la salud que haga un buen diagnóstico”.
Paulina Mora, nutricionista, magíster en Neurociencias de la Educación y coordinadora del módulo docente asistencial Los Castaños de Campos Clínicos UDP recalca que “no es necesario recurrir a jugos o infusiones détox para ‘desintoxicar’ el cuerpo. Nuestro organismo ya cuenta con mecanismos naturales muy eficientes para eliminar toxinas. Estos órganos trabajan constantemente en estos procesos, filtrando y eliminando sustancias que el cuerpo no necesita. Órganos como el hígado, los riñones, los pulmones, la piel y el sistema digestivo, son los encargados de estos procesos”.
Junto con eso, afirma que “llevar una dieta ‘détox’ puede representar múltiples riesgos para la salud. Este tipo de regímenes suelen implicar restricciones calóricas severas y un aporte insuficiente de macro y micronutrientes, lo que puede comprometer funciones fisiológicas fundamentales. Además, no son adecuadas para personas con ciertas patologías, ya que pueden agravar condiciones preexistentes. Es fundamental considerar que las necesidades nutricionales varían según el individuo, su estado de salud, su etapa del ciclo vital y su nivel de actividad física. Por ello, cualquier intervención dietética debe ser personalizada y basada en evidencia científica para asegurar un aporte adecuado de nutrientes y mantener el equilibrio metabólico“.
El peso de las redes sociales
Con respecto a las redes sociales y la presión de siempre aspirar al denominado cuerpo perfecto, la nutricionista de la Universidad Central llamó “a cuidar aquellos grupos que son mucho más vulnerables. Que son los niños y los adolescentes. No va solamente de la mano con respecto a la alimentación, sino que también con un tema de crianza que tenga un apoyo por parte de las personas que estén a cargo de estos niños y adolescentes, porque finalmente, si los dejamos libres al consumo de redes sociales pueden ver todo y más donde una arista es la alimentación”.
“Creo que una persona adulta tiene un poco más de criterio, pero cuando estamos hablando de niños y adolescentes, no. Es ahí donde tenemos que tener cuidado y si es que vemos ciertos signos de alerta como la baja muy rápida de peso, daño en la piel, el pelo o las uñas, deberíamos poner un poco más de ojo. Tratar de restringir las redes sociales o el consumo de redes sociales cuando estemos en procesos de alimentación”, recalcó.
Por otro lado, Mora indica que “la presión social ejercida por los estándares del ‘cuerpo ideal’, especialmente a través de redes sociales, puede influir significativamente en la forma en que las personas (particularmente adolescentes) abordan la pérdida de peso. Esta influencia puede llevar a la adopción de dietas altamente restrictivas y conductas compensatorias poco saludables, como el ayuno prolongado, el ejercicio excesivo, incluso el uso de laxantes o inducción de vómitos. Estas prácticas no solo son ineficaces a largo plazo, sino que también aumentan el riesgo de desarrollar trastornos de la conducta alimentaria“.
Fuente: The Clinic
